El veterano del MMA y BKFC Chris Leben quiere aplastar a Quentin Henry el fin de semana del Super Bowl.
Leben, quien había anunciado previamente su retiro a principios de este año, actualmente tiene un récord profesional de 2-1 en Bare Knuckle, siendo su última pelea en junio de 2019. Hasta ahora podido derrotar a Phil Baroni y Justin Baesman, en esa modalidad, fue su única una decisión contra Dakota Cochrane.
El veterano de 40 años está centrando su atención en el futuro y espera que el 2021, sea un años en el que pueda tener mas actividad y triunfos.
“¿Alguien hace una bolsa para cadáveres de 6 pies? Estoy a punto de poner a este tipo en una de ellas. LEBEN vs HENRY 5 de febrero, fin de semana del super bowl de BKFC Mano a mano @bareknucklefc ”, escribió Leven en Twitter.
Leben ha podido reflexionar mucho sobre su carrera tanto en MMA como en los últimos años, y eso incluye su pelea final con UFC cuando fue derrotado por Uriah Hall por retiro de esquina.
“Esto es lo más importante de lo que quería hablar”, explicó Leben. “Mi carrera en UFC no terminó como yo quería. No creo que la mayoría de la gente lo haga, pero terminé pasando por un montón de luchas, tanto dentro como fuera de la jaula, luchando contra la adicción, luchando contra el alcoholismo. Al final, cuando vine aquí a The Arena, tomé ese camino hacia la recuperación. La mayoría de las personas que me siguen saben que acabo de recibir mi moneda de dos años. Así que he estado 100% sobrio durante dos años. La batalla ha sido mucho más larga que eso. Han pasado cuatro años que realmente he trabajado en eso. He tenido dos deslices con el alcohol en los últimos cuatro años, pero los últimos dos años, me he abstenido de todo, y si Dios quiere, así será el resto de mi vida.
“Para un tipo que es conocido por poner su corazón en la jaula, para un tipo que saldría y moriría antes de rendirse en una pelea, terminé mi carrera en UFC en el taburete”, continuó Leben. “Ahora, si no sabes lo que eso significa, eso significa que no respondí al timbre para el tercer asalto. El árbitro no me descartó. No hubo TKO ni sumisión. Simplemente no respondí al timbre para la tercera ronda. Eso es porque mi corazón no estaba en eso. Eso fue devastador para mí. Para mí fue paralizante terminar mi carrera de esa manera “.
