Hace ya varios años, cuando apenas era el campeón interino de peso pluma, Conor McGregor tuvo un cruce de declaraciones con Donald Cerrone, cuando criticó a todos los peleadores de 155 libras y advirtió que eventualmente subiría por ese campeonato.
Ahora, a menos de una semana de enfrentar a Donald Cerrone en 170 libras, Conor reflexiona sobre el combate.
“Ha pasado mucho desde entonces. Yo solo era el campeón interino pluma. Él ha salido a tener algunas grandes peleas, y yo salí a hacer lo que he hecho, obviamente. Muchas cosas han cambiado.”
“En cuanto a habilidades, probablemente él se ha quedado igual, diría yo. Yo estoy muy, muy bien preparado. Mi equipo ha sido fenomenal este campamento. No puedo darle suficientes gracias a las personas cercanas a mí. Me siento muy bien de estar en la posición en la que estoy.”
En vez de enfocarse en promover la pelea o provocar a su oponente, esta vez McGregor ha optado por mantener un perfil bajo y dedicarse a entrenar.
“He estado haciendo el trabajo, enfocado, comprometido. Eso es todo, nadie me toca cuando hago eso. Nadie me toca, no tienen idea. El último campamento fue horrendo, y no tengo a nadie que culpar más que a mí mismo. Afortunadamente tengo un equipo fuerte a mi alrededor que me empuja y me guía por el camino correcto. Yo me estoy guiando a mí mismo, y eso es lo principal. Me estoy escuchando a mí mismo, y estoy haciendo el trabajo que necesito hacer, lo que sé que tengo que hacer.”
McGregor asegura tener su mente totalmente concentrada en la pelea. Esta vez no hay distracciones, ni tampoco está preocupado por sus múltiples negocios.
“Pelear siempre está en mi mente ahora, ya sé que tengo muchos negocios y todas esas cosas. Pero pelear es lo mío, y estoy concentrado en eso. Le voy a recordar a todo el mundo y después seguir ascendiendo. Seguir recuperando mi agudeza y aumentarla, ver hasta dónde llega.”